¿Cómo saber cuál es la mejor tablet para estudiar?

Los estudiantes modernos difícilmente desaprovechan las nuevas tecnologías. Ya sea en las escuelas o universidades, los aparatos electrónicos se han vuelto un dispositivo fundamental para la vida académica.

En esta oportunidad, vamos a revisar en profundidad uno de los más populares: las tablets. Como estamos por ver, estas aparecen como el compañero ideal para la vida académica.

Luego de explicar las ventajas que puede tener una tablet, trataremos de darles una guía rápida para que puedan elegir la tablet ideal.

La importancia de invertir más en dispositivos de calidad

Los dispositivos de más calidad son bastante más costosos, debido a que están fabricados con materiales de mayor durabilidad. Además, tienen componentes internos con más potencia y, por lo tanto, ofrecen un rendimiento mucho más alto.

Al momento de elegir un nuevo dispositivo, resulta mucho más conveniente elegir alternativas de buena calidad con la potencia suficiente para tener una mayor vida útil. De esta manera, a largo plazo, resulta mucho más conveniente contar con este tipo de dispositivos.

Además de que también es una forma de asegurarte de que podrás realizar todas las funciones que quieras llevar a cabo con tu dispositivo. Así como también es mucho más compatible con nuevas tecnologías y no necesita de una actualización constante.

¿Tablet o laptops?

A pesar de que hace tan solo unos pocos años las notebooks eran el dispositivo portátil por excelencia, hoy en día las tablets le están pisando los talones. Los rápidos avances en la tecnología de estos últimos han logrado llevarlos a un nivel muy similar a las computadoras móviles.

De la misma forma que las laptops se popularizaron por su conveniencia y practicidad por sobre las clásicas computadoras de escritorio, algunos usuarios están encontrando en las tablets una forma más cómoda de mantenerse conectados en todo momento.

Antes de continuar, no podemos dejar de mencionar que las tablets pueden competirles a las laptops solo cuando les agregamos un teclado bluetooth. Sin este último, su uso en ambientes estudiantiles o laborales se mantiene bastante menos práctico que el de las laptops.

En primer lugar, las tablets son mucho más ligeras y fáciles de transportar que las laptops. Y esto sin mencionar que, aun contando los varios complementos que podemos agregarle, su precio es bastante menor.

Algunos complementos útiles para tablets

Más allá del teclado bluetooth, existen otros complementos que pueden mejorar la experiencia de usuario con una tablet. Aunque seguramente hay más de los que vamos a mencionar, hoy vamos a tratar de concentrarnos en los más fundamentales: el mouse inalámbrico y el soporte.

A pesar de que en algunos casos el teclado bluetooth incluye también un soporte improvisado, al contar con un soporte especializado podemos tener una experiencia mucho más cómoda. Estos varían mucho, pudiendo encontrarse desde simples y ligeros soportes hasta algunos que funcionan como mini-carpetas donde llevar nuestra tablet y sus complementos.

Por su parte, aunque un mouse inalámbrico no es estrictamente necesario para una experiencia cómoda, este puede darnos una interfaz más completa. Sin embargo, es verdad que en los habitualmente pequeños bancos de las escuelas y universidades quizá la pantalla táctil sea lo mejor.

Ahora que terminamos nuestra introducción a las tablets vamos a pasar a explicar más detalladamente aquellos componentes importantes en un equipo veloz. Recuerden que si bien hoy nos enfocaremos solo en el desempeño, también hay otros factores a tener en cuenta como la pantalla o la batería.

La memoria RAM

Vamos a empezar la parte más técnica del artículo con una de las partes más importantes para la velocidad de una tablet (y cualquier computadora en general), la memoria RAM.

A grandes rasgos, la memoria RAM nos dice que tanta información puede procesar el equipo al mismo tiempo. Dentro de cualquier tablet hay mucha información. Sin contar el almacenamiento adicional, algunos modelos pueden llegar a contar con alrededor de 500 GB.

Esta información engloba todos los datos dentro de nuestra tablet: desde las fotos y videos que descargamos hasta cualquier tipo de aplicación. Como podrían imaginar, una tablet no puede trabajar con tanta información a la vez, encontrando su límite en alrededor de 16 GB de memoria RAM (aunque algunos modelos más avanzados podrían superarlo).

Entonces, la RAM aparece como algo clave para el desempeño general, pero encontramos su función más específica en el multitasking, es decir, hacer varias tareas a la vez.

Un ejemplo de esto podría ser escuchar música mientras chateamos y mantenemos abiertas páginas en el navegador, o cuando reproducimos un video de fondo mientras revisamos mails o redes sociales.

• Para empezar, lo mínimo e indispensable de memoria RAM para una tablet es 3 GB de RAM.
• Por otro lado, en los modelos de gama media los 6 GB son la norma.
• Si por su parte hablamos de las gamas más altas, aquí no es difícil encontrar modelos de 8 o incluso 12 GB de RAM.

El procesador

Pasemos ahora a otro de los componentes más importantes (por no decir el más importante) en un equipo rápido: el procesador. El procesador es el corazón de una tablet, siendo aquí donde se realiza una buena parte del “trabajo” del dispositivo.

Si la memoria RAM es la cantidad de información con la que el equipo puede trabajar al mismo tiempo, el procesador es quien hace el trabajo en sí. Esto hace que estos dos componentes están muy relacionados y se limiten mutuamente: un procesador muy bueno no podrá llegar a su máximo desempeño con poco RAM y un equipo con un mal procesado funcionará despacio sin importar el RAM.

Sin meternos en el detalle fino (nos llevaría demasiado tiempo y tendríamos que ser muy técnicos), hay dos cosas que hay que tener en cuenta al ver el procesador de una tablet: su número de núcleos y su velocidad de reloj.

• En el caso de las tablets económicas, un procesador de 4 núcleos y 2.0 GHz sería un buen mínimo.
• Por su parte, los modelos de gama media suelen contar con un procesador de entre 6 y 8 núcleos con una velocidad de reloj de entre 2.0 y 2.5 GHz.
• En cuanto a los tope de gama, aquí podemos encontrar unos entre 8 y 12 núcleos y 3.0 GHz (o más) de velocidad de reloj.

Con esto último damos por finalizado nuestro artículo de hoy. Esperamos habernos hecho entender, comprendemos que este tema puede ser un tanto complicado para quienes no estén en el rubro, por lo que hicimos nuestro mejor esfuerzo para mantenerlo simple.

De todas formas, si algo no quedó del todo claro, siempre pueden revisar directamente los valores de referencia. Si este es el caso, les recomendamos revisar que no haya pasado mucho tiempo desde la publicación del artículo, ya que en el mundo de la tecnología las especificaciones promedio se desactualizan rápido.